El británico Thomas Dolby fue en al primera mitad de los 80 una de las figuras punteras del Tecno Pop y uno de los artistas mas curiosos de esa década. Su estilo nada tenía que ver con Yazoo, ni con Depeche Mode, ni con OMD y ni tan siquiera con Japan. Dolby era un alquimista de la tecnología sonora que se pasaba meses y meses grabando el solito sus álbumes y luego haciendo delirantes presentaciones en directo donde demostraba que no tenía ningún miedo al ridículo. Fue una figura admirada durante un tiempo y se ganó fama de gran productor e ingeniero de sonido, produciendo a gente tan musicalmente diferente a el como George Clinton o Foreigner. Su Tecno era arty, excéntrico y experimental, y este tema, es sin duda su canción mas popular.
Naturalmente, una canción tan excéntrica como la que nos ocupa precisaba de un videoclip no menos excéntrico, y el resultado fue esta stravaganzza que sigue sorprendiendo incluso hoy en día. Es uno de esos videos que cuando se pasaba por la tele hace más de 20 y te dejaba hipnotizado delante de la pantalla. Una muestra del videoarte aplicado al campo del vídeo musical. Una visión descárnate del psicoanálisis y de un problema que esta tan de moda en la actualidad, la hiperactividad infantil. Claro que todo muy salido de madre y bizarro. Mejor es que lo disfrutéis cuanto antes.
Naturalmente, una canción tan excéntrica como la que nos ocupa precisaba de un videoclip no menos excéntrico, y el resultado fue esta stravaganzza que sigue sorprendiendo incluso hoy en día. Es uno de esos videos que cuando se pasaba por la tele hace más de 20 y te dejaba hipnotizado delante de la pantalla. Una muestra del videoarte aplicado al campo del vídeo musical. Una visión descárnate del psicoanálisis y de un problema que esta tan de moda en la actualidad, la hiperactividad infantil. Claro que todo muy salido de madre y bizarro. Mejor es que lo disfrutéis cuanto antes.
No hay comentarios:
Publicar un comentario