martes, septiembre 07, 2010

El aparatito de Lumiere - LOPE



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Interesante producción de época española con una premisa poco usual en estos tiempos que corren: llevar a la pantalla una pequeña pero apasionante parte de la vida del insigne dramaturgo y poeta del Siglo de Oro español Lope de Vega (1562-1635). El resultado, una película que con ciertas concesiones a la biografía adornada y enriquecida para hacerla atractiva al pública (véase ejemplos tan geniales como Amadeus, o en menor medida la más reciente Shakespeare In Love, la cual toma en parte como referencia) consigue ser pese a todo un filme sólido, honesto, inteligente y además entretenido. Un Lope de Vega pre treinteañero mujeriego, romántico y rebelde a partes iguales es lo que nos presenta esta película, la crónica de un hombre tan talentoso como de personalidad arrolladora y desordenada, lo que ponía en serio peligro sus pretensiones artísticas y vitales. Un buen guión (tal vez demasiado sencillo) firmado por Jordi Gasull e Ignacio Del Moral guía el no menos excelente trabajo en la dirección del brasileño Andrucha Waddington en su primera incursión en el cine español. Imágenes y escenografías muy elaboradas, excelente vestuario, cuidada ambientación, sugerente fotografía de Ricardo Della Rosa y nada desdeñable música de Fernando Velázquez, que entusiasmarán a los amantes del cine de época.


El joven poeta Lope de Vega, interpretado excelentemente por Alberto Amann, la revelación el año pasado con Celda 211 vive un gran dilema al tener que elegir entre dos mujeres: Elena Osorio (Pilar López de Ayala) la hija de el hombre que puede lanzarle como dramaturgo, y Isabel de Urbina (Leonor Watling) un antiguo amor al que le ha dedicado varios poemas. Intrigas, adulterio, corrupción y duelos a espada sazonan el filme con diversas gotas de cine de género, aunque en ningún momento se cae en lo comercial. Buenas interpretaciones en general, donde a parte de la Amann cabe destacar la de Juan Diego como el mecenas teatral Jerónimo Velázquez, por el contrario, la presencia de Miguel Angel Muñoz como un nada creíble Tomás de Perrenot, rival de Lope, no es acertada. Otro pero que se puede poner al Lope es lo poco cuidado que esta el castellano del siglo XVI (prácticamente utilizando el del siglo XXI) y una insuficiente explotación de la obra poética de Lope, que en el filme se oye pero esta regularmente recitada (es interesante el momento en el cual el joven literato improvisa aquello de “Un soneto me manda ser violante…”, pero podía estar mejor logrado). Por lo demás la película tiene de todo, aunque en pequeñas y fragmentadas dosis: acción, intrigas, amor, drama, comedia y también algo de sexo. Nada del otro jueves, desde luego, pero al fin de cuentas una película oportuna y recomendable.



lunes, septiembre 06, 2010

Mis 50 discos que te cagas (5): THE BEACH BOYS – PET SOUNDS (1966)



Beach Boys siempre son recordados como aquel grupo de perfectas armonías vocales y gorgoritos en falsete o nasales que con sus instrumentación eléctrica pulcra cantaron en la década de los 60 a las playas californianas con su sol, sus chicas y sus mozalbetes surfeando. Pero fueron mucho más que eso: la banda familiar capitaneada por el gran Brian Wilson fue un grupo enormemente competente tanto en el estudio como en directo que bien pudo alcanzar cotas musicales mayores (especialmente a partir de la segunda mitad de los 60) si no fuese por la inestabilidad mental y profesional de Brian Wilson, el cerebro musical y el genio detrás de este Pet Sounds, uno de los mejores álbumes de la historia. Tras esta joya de 1966, Beach Boys, jamás volverán a hacer nada parecido.


En 1966 el cálido pop californiano o el surf pop parecían haber remitido en la Costa Este norteamericana a favor de un nuevo sonido que también venía de California: la psicodelia. Los tres hermanos Wilson, su primo Mike Love y Alan Jardine empezaron a tomar nota y se quedaron anonadados cuando escucharon el Rubber Soul de los Beatles. La fiestuqui playera terminó, ahora comenzaba la expansión mental y musical. Pet Sounds fue el primer LP superambicioso de la historia del rock, algo así como la primera gran superproducción del estilo musical, superada tan solo un año después por el Sargent Pepper de The Beatles. Una por entonces revolucionaria grabadora de ocho pistas, una descomunal legión de músicos apoyando a los cinco miembros oficiales de la banda y algunas dosis de LSD consumidas por el inestable Brian configuraron la primera opus magna pop de la historia. Brian concibió prácticamente todo el álbum, arrinconando a sus compañeros y convirtiendo casi el disco en un proyecto en solitario, al menos desde el punto de vista intelectual. Tony Asher, un creativo de sloganes publicitarios, fue el letrista de casi todos los temas.


En Pet Sounds, hasta los instrumentales supuestamente surf de toda la vida sonaban a lisergia, como la canción que da título al disco, pero lo más atractivo del disco es sin duda el precisosismo barroco, psicodélico y preprogresivo de baladas como I Just Wasn´t Made For These Times, que en la célebre God Only Knows llega a su momento más álgido. En general, el disco mantiene un equilibrio entro lo lúdico y lo ambicioso, como ilustra uno de los hits del álbum Sloop John B, preciosa adaptación de un tema tradicional con el grupo en todo su esplendor en cuanto a interpretación vocal o la imprescindible Wouldn´t It Be Nice, otro de los himnos de la banda, una canción que anticipó el concepto de minisinfonía pop, que el grupo explorará mas tarde en el single Good Vibrations (y del que los Beatles tomarán cuenta). Baladas como You Still Believe in Me señalaban que el grupo habia dejado de ser una banda teen y que se aferraba a la madurez para encandilar a un público ansioso de nuevas experiencias y emociones.


En fin, toda una gozada que no obtuvo continuidad: Brian Wilson convirtió el siguiente proyecto del grupo en una enfermiza obsesión que quedó inacabada, pese a contar con la ayuda del compositor Van Dyke Parks: Smiley Smile fue un LP inacabado. Alejado del directo (Bruce Jonhston, su sustituto en los bolos, tomó parte activa en el estudio en PS, como sexto miembro), el distanciamiento de Brian del resto del grupo originó el declive de los Beach Boys. Se recordarán muchas canciones alegres y hedonistas de tal vez el mejor grupo norteamericano de la historia, pero Pet Sounds merece ser considerado (y de hecho lo es) como uno de los mejores discos de pop que se han hecho jamás.



FICHA TÉCNICA


Géneros: Pop Californiano, Psicodelia, Pop-Rock, Art Pop

Publicación: mayo 1966

Producción: Brian Wilson

Duración: 35:58

Músicos:

Brian Wilson: voz, órgano, piano

Mike Love: voz

Carl Wilson: voz, guitarra

Al Jardine: voz, pandereta

Dennis Wilson: voz, batería

Bruce Johnston: voz

Glen Campbell: guitarra

Hal Blaine: percusión

Carol Kaye: bajos

Jim Gordon: batería, percusión

Jim Horn: saxo, flauta

Frank Capp: percusión

Larry Knetchel: órgano

Ray Caton: trompeta

Jerry Cole: guitarra

Steve Douglas: viento

Billy Strange: guitarras

Y hasta 46 músicos más



Track listing

1- Wouldn´t It Be Nice

2- You Still Believe In Me

3- That´s Not Me

4- Don´t Talk (Put Your Head On My Shoulder)

5- I´m Waiting For The Day

6- Let´s Go Away For a While

7- Sloop John B

8- God Only Knows

9- I Know There´s an Answer

10- Here Today

11- I Just Wasn´t Made For These Times

12- Pet Sounds

13- Caroline, No