viernes, marzo 28, 2014

MERCHANDISE 7X: CRÓNICAS DE LA FÓRMULA SECRETA DE LA COCA-COLA




Uno de los más grandes enigmas de la humanidad: ¿Cuál es la fórmula de los  ingredientes secretos de la bebida Coca-Cola? Desde 1886 año en que se creó la famosa bebida refrescante carbónica que dio origen a una de las compañías multinacionales más poderosas, la fórmula patentada- que ha sufrido algunas variaciones a lo largo del tiempo- se ha mantenido en el mas total de los secretos hasta hoy día dando origen a especulaciones, leyendas urbanas y mitos varios algunos fundamentados, otros no tanto y varios pelín esperpénticos. Pero tal secretismo industrial- la compañía Coca-Cola tiene guardada la fórmula escrita en una caja fuerte y según se reza la leyenda solo dos personas de su compañía la conocen-nunca ha servido para mucho: de un modo u otro a lo largo de los 128 años de vida de la bebida de cola su supuesta receta se ha ido filtrando por parte de diferentes fuentes basándose en hallazgos de libros de notas, entrevistas con personas (supuestamente), análisis y alguna noticia o filtración que se dio en su día. Todas las supuestas fórmulas de la Coca-Cola que han visto la luz mantienen como veremos bastantes ingredientes en común que hacen pensar que efectivamente dichos ingredientes- independientemente de las cantidades exactas- están incluidos. Al final, como dijo aquel tanto misterio para nada, aunque eso sí, la compañía Coca-Cola siempre se apresura a decir que tal o cual fórmula hecha pública es incorrecta.

Lo irrefutable es que alrededor de la fórmula de la Coca-Cola, llamada por la empresa  Merchandise 7x, se ha construido toda una mitología que es ya casi un estándar universal. El llegarla a conocer, se ha llegado a convertir en uno de los fines últimos de la humanidad y consciente de ello, The Coca Cola Company ha hecho circular todo tipo de rumores y pistas falsas con más orientación de marketing que otra cosa. Todo un imperio económico y el secreto del característico sabor de una bebida consumida por doquier a lo largo de más de un siglo parecen supeditados a una simple lista de ingredientes para preparar un brebaje cuyo conocimiento por parte del consumidor siempre se ha antojado imposible. Esto comenzó, como ya dijimos, en 1886 cuando el farmacéutico y químico John Pemberton (1831-1888) creó Coca-Cola, una bebida no alcohólica basada en el tónico French Wine Coca, un vino de coca que creó el año anterior (el vino de coca era un reconstituyente  alcohólico del siglo XIX). Pemberton quería una bebida que fuese un tónico reconstituyente con efectos similares a la morfina - de la que él era adicto- pero la Coca-Cola de 1886 pronto se vio que difícilmente podía ser un medicamento en el sentido estricto de la palabra y aunque se creyese en el siglo XIX que el agua carbonatada era altamente beneficiosa para la salud. Al igual que el vino de coca, la coca fue el ingrediente esencial en la primitiva bebida y de allí su nombre. En 1888, año en que falleció Pemberton, el producto  Coca-Cola se fabricaba por tres compañías diferentes regidas por varios empresarios  de Atlanta (Georgia) aunque Charley Pemberton, el hijo de John, era el propietario del nombre de la marca. En todas las compañías, que más tarde convergieron, se utilizaba la misma fórmula ideada por John Pemberton.  A finales de 1888, nacía oficialmente The Coca-Cola Company con Charles Howard Candler como presidente y fundador y en muy poco tiempo después Coca-Cola se distribuía por todo EEUU.

John Pemberton
La fórmula original de John Pemberton ha ido modificándose con el paso del tiempo a la vez que diferentes marcas de refrescos de Cola han ido surgiendo en todo el mundo (Pepsi, el mayor competidor internacional de Coca-Cola, sin ir más lejos). Pese a que todos  los refrescos de Cola saben similar- comparten siempre ingredientes como la cafeína-  su sabor siempre presenta matices y en ese sentido la Coca-Cola tiene y ha tenido siempre su propia fórmula para dar su sabor particular. La primera Coca-Cola (el primer refresco de cola que existió) tenía como ingredientes fundamentales por un lado la cocaína extraída de las hojas de cola y por otro la cafeína que originalmente se obtenía de la nuez de kola, dando origen ambos productos al nombre de la bebida. Junto a ellos, una lista secreta de ingredientes naturales con los que se elaboraba el sirope o jarabe que daba el sabor peculiar al brebaje. En 1891, Charles Howard Candler modificó la fórmula de la Coca-Cola reduciendo la cantidad de cocaína. A partir de comienzos del siglo XX se empezaron a emplear hojas gastadas del proceso de extracción de cocaína con bajos niveles de esa sustancia y hoy en día se sabe que la Coca-Cola lleva extracto de coca sin cocaína, producido en Perú y Bolivia. Desde entonces, la cafeína ha actuado como el principal ingrediente estimulante de la bebida, si bien varias fuentes aseguran que la cafeína no era un ingrediente original sino que se introdujo en la bebida una vez suprimida la cocaína en 1903. La fórmula de la Coca-Cola (se supone que la segunda) fue patentada por vez primera el 21 de enero de 1893.  

Anuncio con las supuestas propiedades medicinales de la bebida
En la actualidad, el jarabe elaborado con la fórmula secreta aparece etiquetado en los ingredientes de la bebida como “aromas naturales” junto con ingredientes catalogados como públicos: Agua carbonatada, azúcar, cafeína, ácido fosfórico y colorante caramelizado E150d. El concentrado o jarabe es el segundo elemento dentro del proceso de producción de Coca-Cola. Este concentrado llega a las fábricas de las sedes centrales de cada país supuestamente procedente de la sede central de la compañía en Atlanta. El lugar donde ha sido mezclado y elaborado no parece nada claro. El concentrado llega en tambores de acero inoxidable y después se mezcla con azúcar y agua tratada dando lugar al conocido como “jarabe terminado” que una vez mezclado con el gas carbónico origina el producto final. Además de los cuatro ingredientes conocidos básicos que aparecen en las etiquetas, Coca-Cola también incluye jarabe de maíz con fructosa (sacarosa de caña de azúcar en su lugar durante un tiempo en los 80), extracto de coca, extracto de lima, vainilla y glicerina. El hecho de que la Coca-Cola incluya coca entre sus ingredientes (en el pasado, como vimos, llevó cocaína) siempre ha generado multitud de bulos y rumores - la cantidad actual de coca no supone ninguna propiedad narcótica- entre ellos el de el hecho de que la fórmula secreta aún sigue llevando cocaína, algo que es falso: con todo la empresa siempre ha declinado comentar si utiliza o no hojas de coca en la elaboración de la bebida dando a entender que el producto se encuentra entre los componentes del la fórmula secreta y aunque su empleo es un secreto a voces. Desde principios del siglo XX, Coca-Cola no utiliza la cafeína del extracto de la nuez de Kola, que en el pasado era el ingrediente principal que le daba sabor. La Coca-Cola actual debe su sabor principalmente a la vainilla y a la lima y a algunos ingredientes del jarabe secreto, posiblemente naranja, limón y algún fruto seco (se dice que la nuez moscada).  


La receta Pemberton

El supuesto dietario de Pemberton con la fórmula

La primera fórmula de John Pemberton ha sido una de las más “pirateadas” y codiciadas de conocer. Una página de un dietario escrito poco antes de su muerte al parecer reproducía una receta que incluía diversos ingredientes la mayor parte corroborados después y hechos públicos,  más el contenido de la misteriosa fórmula Merchandise 7X. Esta fórmula completa fue hecha pública en una revista local de Atlanta The Atlanta Journal-Constitution en 1979 pasando desapercibida y después apareció en otros medios escritos de ámbito local en diversas ciudades de EEUU. Alcanzó notoriedad al aparecer reproducida en 1993 en un estudio sobre Coca-Cola y otros refrescos de cola escrito por Mark Pendergrast, For God Country and Coca-Cola y desde entonces ha aparecido en diferentes publicaciones y páginas web con algunas matizaciones y suposiciones:     

·         1 onza de citrato de cafeína.
·         3 onzas de ácido cítrico
·         1 onza de extracto de vainilla
·         1 cuarto de galón de zumo de lima.
·         2 ½  (0,059 l) onzas de “aroma” (Merchandise 7x)
·         30 libras (14 kg) de azúcar. (se supone que se trata de libras, no se especifica la medida)
·         4 onzas de extracto fluido de coca
·         2 ½ galones de agua.
·         Caramelo colorante (algunas fuentes señalan que media onza)

Merchandise 7X:
·         80 aceite de naranja
·         40 aceite de canela
·         120 aceite de limón
·         20 aceite de cilantro
·         40 aceite de nuez moscada
·         40 aceite de neroli
·         1/4 alcohol

Aunque en esta receta no se especifica el momento de las mezclas, se cree que la cafeína, el zumo de lima, la vainilla y el aroma (Merchandise 7X) se mezclaban juntos, pero no se sabe cuando se añadían el azúcar, la coca, el caramelo y la mayor parte del agua. Se supone que el M7X había sido mezclado y preparado previamente a la mezcla junto a los otros ingredientes. Como se ve en la receta, no se conoce que unidades de medida se utilizaban para los ingredientes del M7X, pero según varias fuentes podría tratarse de gotas.  

Pese a que esta se trata de la fórmula “descubierta” más conocida, tal y como reconoce la propia compañía ya no se usa desde hace más de 100 años. Como veremos después, Coca-Cola Company la hizo pública en 2011.   


La receta Memory


La primera supuesta fórmula secreta completa de la Coca-Cola apareció en 1968, propuesta por el farmacéutico James Memory en su libro divulgativo Flood Flavourings: Composition, Manofature and Use. Enormemente detallada y compleja (no solo señalaba los ingredientes sino el proceso de elaboración de la receta completa) no se sabe como la consiguió pero en su época no obtuvo demasiada credibilidad y la propia Coca-Cola Company desmintió que esa fuera la Merchandise 7X auténtica. Con todo, ha tenido y sigue teniendo muchos defensores aunque la fórmula actual, al igual que la de Pemberton, sea ya diferente. Esta receta sería la de la Coca-Cola de los años 60 y es para un galón de jarabe (3,8 litros)     

·         Mezclar 2,4 kg de azúcar con suficiente agua para disolver el jarabe de maíz (puede ser sustituido por la mitad del azúcar).
·         Añadir 37 g de caramelo; 3,1 g de cafeína, y 11 g de ácido fosfórico
·         Extraer la coca de 1,1 g de hoja de coca (Truxillo, hoja crecida preferiblemente) con tolueno; extracto seco de coca.
·         Remoje las hojas de coca y las nueces de cola (tanto en polvo finamente; 0,37 g de nueces de cola), en 22 g de 20 % de alcohol (La coca no es usada en Latinoamérica y Europa).
·         Vino blanco fortificado al 20 % (ingrediente original que ya habría desaparecido en 1968).
·         Después del remojo y tras descartar la coca y las nueces de cola, agregar el jarabe líquido.
·         Añadir 30 g de jugo de limón o un sustituto del agua, como una solución de ácido cítrico y citrato de sodio en el jugo de lima.
·        Mezclar 0,88 g de aceite de limón; 0,47 g de aceite de naranja, 0,2 g de cassia (canela china) en aceite, 0,07 g de aceite de nuez moscada, y, si lo desea, los rastros de cilantro, lavanda y aceites de neroli, y añade 4,9 g de alcohol de 95 %.
·         Agitar.
·        Añadir 2,7 g de alcohol con agua / mezcle el aceite y deje reposar por 24 h a unos 15,5 ºC Observará capas de nubes que se separan.
·         Quite la parte clara del líquido y sólo añadir el jarabe.
·         Añadir 19 g de glicerina  y 1,5 g de extracto de vainilla.
·         Agregar agua (tratada con cloro) para hacer un galón de jarabe.

Como se ve, existe una coincidencia en ingredientes de la fórmula secreta como los aceites de naranja, limón, neroli, nuez moscada y canela además del cilantro (aquí rastros en lugar de aceite) y alcohol; a ellos se sumarían la lavanda, que bien pudiera ser un nuevo ingrediente en la nueva fórmula con respecto a la de Pemberton. Así, comparando ambas recetas veríamos que Memory no andaba demasiado desencaminado: independientemente de las cantidades, pueden haber sido esos los ingredientes del los primeros Merchandise 7X durante varios años.


La receta Reed

El farmacéutico John Reed publicó en 2005 una nueva versión de la formula secreta de la Coca-Cola ciñéndose en teoría casi únicamente a la composición del Merchandise 7X. Apareció en el libro A Rich Deliciously Satisfying Collection of Breakfast Recipe y esta formula correspondería al actual M7X

·         30 lb (14 kg) de azúcar.
·         2 US gal (7,6 l; 1,7 imp gal) de agua.
·         1 US qt (950 ml; 33 imp fl oz) de jugo de lima.
·         4 oz (110 g) de citrato de cafeína.
·         2 oz (57 g) de ácido cítrico.
·         1 US fl oz (30 ml; 1,0 imp fl oz) de extracto de vainilla.
·         3/4 US fl oz (22,18 ml; 0,78 imp fl oz) de extracto de nuez de cola
·         3/4 US fl oz (22,18 ml; 0,78 imp fl oz) de extracto de coca.

Según Reed, la cafeína sería uno de los ingredientes de la M7X o mejor dicho, su cantidad. Con respecto a las recetas de Pemberton y Memory desaparecen las frutas cítricas (sustituidas por el ácido cítrico) así como los frutos secos de nuez moscada y neroli. Tanto la hoja de coca como la nuez de cola permanecen como ingredientes de la fórmula a pesar que siempre se ha dicho que la nuez de cola ya no se emplea en al elaboración del producto.


La receta Beal

¿Una última fórmula descubierta?

 En febrero de 2011 el presentador radiofónico Ira Glass afirmó en su exitoso programa This American Life el hecho casi olvidado de que el diario The Atlanta Journal-Constitution reprodujo en 1979 la fórmula de la Coca-Cola. Glass, pero sin tener  en cuenta el redescubrimiento que hizo Mark Pendergrast en 1993 de la Receta Pemberton que apareció en dicho diario. Fue incluso más allá al citar el título del artículo y su autor: Everett Beal´s Recipe Book, siendo Beal un amigo y colaborador de Pemberton que transcribió la fórmula directamente del diario de Pemberton para anotarla en un libro de recetas. Lo particular es que esta receta, aunque muy similar al la publicada por Pendergrast en los 90, tenía algunas leves diferencias que serían atribuibles a las transcripciones.

·         Extracto de coca: 3 drams USP (11,09 ml)  
·         Ácido cítrico: 3 onzas (88,7 ml)       
·         Cafeína: 1 onza (29,5 ml)    
·         Azúcar: 30 #          
·         Agua: 2,5 galones (7,5 l)     
·         Zumo de lima:  2 pintas (0,94 l)       
·         Vainilla: 1 onza (29,5 ml)    
·         Caramelo colorante: 1,5 onzas (0.029 l) o más        

Merchandise 7X (2 onzas (59 ml) de M7X o 5 galones (18,9l) de sirope    
·         Alcohol: 8 onzas (236,4 ml)
·         Aceite de naranja: 20 gotas
·         Aceite de limón: 30 gotas   
·         Aceite de nuez moscada: 10 gotas 
·         Aceite de cilantro: 5 gotas  
·         Aceite de neroli: 10 gotas   
·         Aceite de canela: 10 gotas 

Hay alguna leve variación en las cantidades de coca o caramelo colorante en los ingredientes ajenos al M7X así como en las gotas de los componentes de la fórmula secreta, con todo podemos decir que es la misma fórmula primitiva. Obviamente, al estar en desuso desde más de un siglo no es muy relevante y más si se tienen en cuenta fórmulas más recientes como la propuesta por Reed que difieren significativamente. La compañía, que vio como la receta también se publicó en la página web del programa, se apresuró a desmentir que esa fuese la receta de la bebida, ya que durante el siglo XX a la propia empresa registró y archivó supuestas fórmulas apócrifas del refresco todas ellas incorrectas.  Con todo, la fórmula original de Pemberton, tal y como fue dada a conocer en 1979 se exhibe desde 2011 en la exposición permanente El Mundo de Coca-Cola en Atlanta, sede de la compañía, corroborando  las filtraciones de 1979.  


Por otra parte, además de algunos cambios públicos introducidos de manera episódica a lo largo de la historia de la bebida (como Coca-Cola sin jarabe de maíz para la población judía durante la Pascua) es famoso el fugaz cambio de fórmula que se produjo en 1985 cuando se lanzó la New Coke sustituyendo el componente edulcorante principal: la fructosa del jarabe de maíz por la sacarosa. El cambio fue empresarialmente muy controvertido y la respuesta del público negativa. Tras una enorme polémica a todos los niveles se volvió a la Coca-Cola clásica.

Muhtar Kent, presidente de CC, con la fórmula en la caja fuerte

Es difícil dar por buenas las diferentes fórmulas presentadas aunque la coincidencia de diversos componentes en varias de ellas (frutos cítricos, canela, alcohol, coca, nuez moscada, vainilla) hacen ver por donde van los tiros.  La fórmula detallada y actual del Merchandise 7X parece imposible de conocer si nos atenemos a la historia oficial de de dicha receta. Hasta 1919 la fórmula no fue escrita, ya que en sus primeros años fue conocida de memoria por Pemberton y un pequeño grupo de colaboradores, pasando después al segundo presidente de la historia de la compañía Asa Candler y a sus hombres de confianza. En 1919, el nuevo propietario de la empresa, Ernest Woodruff mandó escribir al hijo de Candler la fórmula en un papel que hasta 1925 fue guardada en una caja fuerte del Guaranty Bank de Nueva York y después en otro banco de Atlanta. En 2011 la fórmula escrita en 1919 (¿original?, ¿modificada respecto a al de Pemberton?) se traslada a Atlanta para ser exhibida en un habitáculo interactivo. Esta fórmula es en realidad la de Pemberton, lo que añade más confusión e incertidumbre a la naturaleza de la fórmula escrita y guardada en 1919 y sus modificaciones posteriores. Además, es de suponer que debido a los diferentes cambios en la fórmula, se establecieron otras fórmulas escritas que hayan podido estar custodiadas en cajas fuertes o lugares de alta seguridad La fórmula actual supuestamente se encuentra en una cámara acorazada en la sede de Coca-Cola con vigilancia las 24 horas.

Se desconoce cuantas personas conocen de memoria la fórmula, como llega la información de los ingredientes para su producción, como se hace la distribución de los mismos y donde y como se produce el jarabe del M7X, todo ello tendiendo en cuenta el celo con que la receta está guardada y el hecho a que teóricamente muy pocas personas conocen la Merchandise 7X. Siempre se ha dicho que en todo el embolado del Merchandise 7X hay mucho de mercadotecnia (¿solo dos personas conocen la fórmula de memoria?, ¿viajan siempre separadamente?, ¿esta realmente la fórmula en una caja fuerte?, ¿lo ha estado siempre?) y bastante leyenda. Sea como fuere, no pasa nada por que no conozcamos exactamente la fórmula de la Coca-Cola (aunque como se ha visto, en realidad se sabe bastante de ella). Cosas hay que son mas importantes. Mientras tanto, disfrutemos de un trago.

domingo, marzo 23, 2014

El Aparatito Lumiere OCHO APELLIDOS VASCOS






**

Nadie se esperaba que el nuevo filme del Emilio Martínez-Lázaro consiguiese ser la película española de mayor taquilla en su primer fin de semana en mucho tiempo y una semana después de su estreno en el momento de escribir estas líneas ya lleva camino de ser uno de los filmes ibéricos más taquilleros de los últimos años, algo a lo que ha ayudado decisivamente una esforzada campaña de marketing. A priori, la comedia Ocho apellidos vascos plantea un curioso reto temático como es el de la visión en clave de comedia de los tópicos del mal llamado abertzalismo de izquierdas vasco (es decir, todo lo ligado con la antigua HB y sus herederos políticos actuales Bildu, Sortu, etc) en una nueva etapa en que para Euskadi se abre una horizonte de esperanza sin lacra de la violencia. El donostiarra Borja Cobeaga, director de Pagafantas (2009) y No controles (2013) ejerce de guionista junto con Diego San José tratando de aplicar el humor desmitificador de los desvelos políticos vasco (la violencia de ETA, las reivindicaciones nacionalistas, el conflicto entre constitucionalistas y vasquistas) y de los tópicos costumbristas que ya cultivase como guionista en el programa de sketches humorísticos de ETB Vaya Semanita, pero no ha podido sustraerse a una concatenación de gags desiguales y una línea argumental pobre basada en las premisas mas simples de la comedia romántica yanki. El choque cultural entre dos zonas de la península ibérica tan diferentes entre sí como Euskadi y Andalucía es lo que ha querido reflejar esta película por medio de una sana y oportuna risa a los tópicos de ambas comunidades, especialmente de la primera ya que es allí donde se desarrolla la mayor parte de esta simpática pero insuficiente comedieta satírico-romántica. Es de agradecer la visión burlesca e irónica de los omnipresentes estándares sociopolíticos vascos al estilo del programa antes mencionado (aquí sin embargo más ácidos) pero los clichés tanto vascos como sureños caen muchas veces en la caricatura pueril y previsible en un conjunto que ya de por si funciona muy mal en cuanto al interés de su historia fruto de un guión vago, desdibujado y supeditado a los gags puntuales.    

Rafa (Dani Rovira) un joven sevillano que se gana la vida como monologuista en el restaurante de unos amigos haciendo entre otras cosas chistes sobre vascos se deja aterrizar en una localidad costera vasca en busca de Amaia (Clara Lago), la chica que conoció en Sevilla y de la que contra todo pronosticó se ha enamorado. Rafa no ha salido de Andalucía y no siente especial afecto por los vascos, pero ante la petición de Amaia deberá de hacerse pasar por Antxon, su futuro marido ante una boda inminente que esta tuvo que cancelar poco antes por plantón de su antiguo novio. Es cierto que el reparto funciona muy bien tanto en sus dos protagonistas - Dani Rovira descacharrante en su evolución de pijo andaluz en caricatura (o no tanto) de prototípico borroka vasquito y Clara Lago esforzada en su rol de borde muchacha abertzale) – como en la pareja secundaria madura que forman Karra Elejalde como Koldo, el padre marino de Amaia (tal vez algo forzado) y sobre todo Carmen Machi como Merche, una viuda residente del pueblo vecino que accede a participar en el vodevil ideado por Amaia, pero los personajes no dan mucho de sí, están garabateados con cuatro líneas y se desenvuelven como pueden en un pequeño caos de puesta en escena desmañada y  guión plano. Muchos momentos desternillantes, sin embargo, y diálogos ingeniosos que se echan a perder conforme la película avanza hacia lo previsible. Se esperaba más de un director como Martínez Lázaro (El otro lado de la cama, 13 Rosas Rojas) y de un guionista como Borja Cobeaga que ya demostró su dotación para la comedia en Pagafantas, pero eso no impedirá que esta película siga triunfando en taquilla ya que el efecto boca-oreja en estos casos es imparable.